Ser joven y empresario en España no es una ventaja, y si a eso le sumamos la situación económica actual, mucho menos. Es cierto, vende mucho decir que eres emprendedor, pero al final de mes ese reconocimiento social no se refleja en resultados económicos, y es que la verdad es bien distinta. En este país nos fiamos más del malo conocido que del bueno por conocer, y no lo digo yo, lo dicen miles de ofertas de empleo, da igual el sector empresarial, así como miles de licitaciones, en las cuales se exige, al menos, que en los últimos dos años hayas estudiado dos carreras, un máster y diseñado el hospital más grande de España, eso si, el hospital debe estar edificado en estos dos años, si no, no me vale.
Esta carta va dirigida a los señores que se encargan de solicitar ofertas de empleo imposibles para jóvenes con ganas de empezar y sobradamente cualificados, o los encargados de redactar los concursos en los cuales solamente se podrán aceptar a las empresas o autónomos con más de 20 años de experiencia…..
Estimados señores, si realmente vamos a cambiar este país, den más oportunidades a los jóvenes, eso si, jóvenes sin experiencia alguna, si no, no me vale.